Por Seth
En esta ocasión les vengo a mostrar los dos estrenos de la semana que en Shinobi consideramos que pueden ser del agrado de nuestros lectores. Y son dos películas nomás, pero que tienen un plantel bien nutrido de figuritas del mundo del espectáculo de las últimas décadas…
Los Indestructibles 2 -The Expendables 2-:
Sylvester Stallone lo dijo claramente en la última ComicCon de San Diego: «muchos de mis compañeros de elenco son estrellas por sí mismas, pero si los unís a todos se forma una galaxia». Y esa es una buena forma de poner en palabras a una secuela en la que se puede disfrutar de todos los clichés que llevaron al estrellato a Stallone, Arnold Schwarzenegger, Jet Li, Chuck Norris, Dolph Lundgren y Jean-Claude Van Damme. La escena inicial, plena de acción ochentosa, pinta que la idea de Stallone era volver a las peleas mas creíbles sin tanto efecto de computación. Pero eso es hasta que Schwarzenegger dice «I’ll be Back», inaugurando los muchos momentos de comedia que los fans de todos esos famosos musculosos agradecerán.
Un detalle de lo mencionado anteriormente: en esta película no abunda el CGI, sino que se han dedicado a reproducir los efectos especiales de los ’80: pólvora, pintura roja para la sangre, sevita, explosiones con harina y mucho más. Acá no es una computadora las que nos recrea la explosión de auto, acá vuela un auto de verdad y se tiran patadas y trompadas auténticas… razón por la cual también se tuvo que lamentar el triste deceso de un doble de riesgo en las últimas semanas de filmación.
En la tarde de ayer, a menos de un día del estreno de la película, salió a la luz un nuevo trailer titulado Airport. Los invitamos a compartirlo con nosotros:
[youtube=http://www.youtube.com/watch?v=KOP-_X6N9B4]
La Era del Rock -Rock of Ages-:
Si era necesaria alguna prueba más de que la cultura pop de los ’80 tiene por estos días una revalorización inédita, esa prueba llegó a los cines hoy bajo el nombre La Era del Rock, con un elenco que incluye a Tom Cruise, Catherine Zeta Jones, Alec Baldwin y Russell Brand.
Esta película es la adaptación cinematográfica de un musical de Broadway que tomó su nombre, a la vez, de un éxito de la banda Def Leppard y la elección de un grupo emblema del glam rock no es azarosa, claro: la película busca recrear el espíritu de finales de la década de 1980, en el que bandas como Bon Jovi, Poison, Guns N’ Roses o los mencionados Leppard copaban los charts y las tapas de las revistas de música con sus canciones e inolvidables peinados batidos.
En el filme, dirigido por Adam Shankman -recordado por otro musical, Hairspray-, Cruise encarna a Stacee Jaxx, una estrella de rock lookeada al estilo de esa época: pelo largo, maquillaje, uñas pintadas y muchos tatuajes. El argumento gira en torno a Drew Boley –Diego González– y Sherrie Christian –Julianne Hough-, una pareja que trabaja en un bar que regentea Dennis Dupree –Baldwin-. Ambos intentan impedir la demolición del local a manos de un grupo empresario. Entre los que buscan cerrar The Bourbon Room, tal el nombre del club, está Patricia Whitmore –Zeta Jones-. Por otra parte, la aspiración de Boley es convertirse en un rocker y, como no podía ser de otra forma, su gran ídolo es el indomable Jaxx.
Jaxx es una estrella de rock que, drogado de éxito, mujeres y aburrimiento existencial, ha dejado de componer canciones y se repite a sí mismo desde hace muchos años, sin que esto haga que su éxito disminuya o sus fans dejen de desmayarse cuando lo ven pasar cerca de ellas. Porque lo que ha llevado a Stacee Jaxx al rock es -se sugiere- una mujer en el pasado, un corazón roto que nunca nadie pudo volver a arreglar. Y lo que lo mantiene en el rock, en ese deseo de -en palabras de Stacee– «prender fuego todo», es la imposibilidad de encontrar lo único que podría darle un poco de paz: el amor.
Así que yo diría que basta de palabrerío, llegó el momento de tomar el subte hacia el centro -total el cospel vale unos 10 australes-, compremos en la boletería nuestra entrada y pasemos a esperar al chocolatinero que nos va a dar un buen Pochoclo Josecito, una Teen y quizás un Tubby 3 o Tubby 4, que vienen de yapa con la entrada. Y veamos en continuado estos dos estrenos hiperochentosos.
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