Por Seth
En las tres salas de la Casa Fernández Blanco -Hipólito Yrigoyen 1420, en el barrio porteño de Congreso- se inauguró el sábado pasado la muestra permanente «Había una vez… muñecas y juguetes (1870-1940)», exposición singular de las muñecas que coleccionaron a lo largo de su vida las hermanas Mabel y María Castellano Fotheringham.
En la inauguración de la muestra se escucharon expresiones de sorpresa y de recuerdo, según la edad de los visitantes. «¡Mirá ésa vestida de comunión!»; «¡Una Shirley Temple!»; «¡Yo jugué con la Marilú!», exclamaban las más de 1400 personas que fueron a conocerlas.
La muestra está conformada por 400 piezas, incluyendo 150 muñecas, que se exhiben en la antigua casa del coleccionista Isaac Fernández Blanco y segunda sede del museo homónimo.
Conmovidas, las dueñas de las muñecas y organizadoras de la muestra no pararon de recibir agradecimientos. «Es una profunda emoción poder ver cumplido uno de nuestros mayores sueños y compartir esta colección que después de tantos años y esfuerzo, hoy queda para todos», dijeron. Después, no pudieron resistir la tentación de volver a mirar sus queridas muñecas, mientras le contaban a la gente dónde las habían conseguido.
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