Por Mariano Aratta // @gutenseth
En lo que parece ser una polémica pero acertada decisión, LucasFilm Limited -la productora fundada por George Lucas en 1971- decidió frenar la producción de los nuevos spin-offs de Star Wars. Entre las razones esgrimieron que la última película, basada en el joven Han Solo, no obtuvo la respuesta de taquilla esperada, además de los continuos problemas cada vez que encaran un nuevo film de la saga -como el cambio de director y los constantes retoques de guión en el mencionado film, el «re rodaje» del último tercio de Rogue One, o la expulsión de sus diferentes producciones de Josh Trank, Colin Trevorrow, Phil Lord y Chris Miller-. Asimismo, aseguran que, aunque se estaba trabajando activamente en una película sobre Obi-Wan Kenobi, sus responsables han dejado de estar involucrados. Algo similar se menciona sobre James Mangold y su proyecto sobre Boba Fett.
Si a esto le sumamos que el Episodio VIII de la saga había tenido una recaudación récord aunque una feroz crítica de los fans, y que Rogue One había sido mejor recibida pero tampoco fue el éxito esperado, la decisión se veía venir y las futuras «Historias de Star Wars«, fueron freezadas por un tiempo, para que la empresa pueda centrarse de lleno en Star Wars: Episodio IX, nuevamente con J.J. Abrams a la cabeza, para devolver a la saga a la cima. Por otra parte, también continuarán trabajando en la siguiente trilogía, que el director Rian Johnson rodará a partir de 2020.
Pero para los fanáticos más acérrimos les tenemos la buena noticia de que esto no significa que todos los títulos que mencionamos estén cancelados, sino que sólo han sido pospuestos por tiempo indeterminado. Lo que es seguro es que Star Wars: Episodio IX verá la luz el 20 de diciembre de 2019 y, por el momento, nada más.
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