Por Por Edu Parera / Bandcamp
PH: Evelyn Flores / Difusión Parlante

Shinobi News concurrió el pasado jueves primero de junio a la hermosísima Sala Siranush en el barrio de Palermo a ver Umma Gumma, Tributo a Pink Floyd. El ingrediente especial de esta ocasión fue la presencia de Durga y Lorelei McBroom, quienes fueron en su momento las vocalistas de Pink Floyd -en su última etapa, con David Gilmour al frente-.

Con la comodidad que la locación nos brindó, la banda arremetió con todo la potencia de In the Flesh -el inicio de The Wall– para luego sorprender con Astronomy Domine de Piper at the Gates of Dawn, el primer disco con el fallecido Syd Barrett. Ya para el tercer tema, luego de climática intro de teclados y guitarra, las hermanas McBroom se hicieron cargo del micrófono -y del espectáculo- con Shine on You Crazy Diamond.

La presencia de las cantantes en escena fue imponente, tanto desde la potencia de sus voces, como de su interpretación. El resto de la banda de ninguna manera se quedó atrás. La ejecución fue impecable y todos sus miembros cumplieron con creces su papel. El cantante, Jorge, alternó como muy buena voz principal, teclados y guitarra acústica, mientras que Ariel, en los teclados principales, también fue voz principal en varios temas, del cual destacamos Mother, de The Wall, a dúo con Durga.

Como la presencia de McBroom en Pink Floyd fue, como ya se mencionó, para la «etapa Gilmour«, hubo mucho repertorio esta época.  Tuvimos el doblete Division Bell con What do you Want From me y el fantástico Coming Back to Life, incluidos. Por otro lado, luego de un cierre de primera parte con Hey You y Another Brick in the Wall, la función se reanudó con Learning to Fly y Dogs of War, del disco A Momentary Lapse of Reason, seguido del momento Dark Side of the Moon con Time, Money -que incluyó una pequeña zapada en el medio del tema- y Brain Damage/Eclipse. Impecable fue la performance de las hermanas en The Great Gig in the Sky, siendo inclusive ovacionadas por el público al concluir.

Para los bises, la banda se guardó los platos fuertes: Wish You Were Here, Comfortably Numb -donde el guitarrista Ariel se tocó absolutamente todo en el solo final, siendo muy respetuoso del estilo de David Gilmour, pero aportando su estilo-. y, para cerrar, del disco The Wall, Run Like Hell, tema que en el final, tuvo a una Durga McBroom bajando del escenario para correr entre la gente arengandola a cantar y aplaudir. Genial.

Este fue un show recomendadísimo para fanáticos de Pink Floyd, ya que el repertorio se ejecutó con sumo respeto, prolijidad y calidad. Hay un énfasis en la música y no en tal vez lookearse como los artistas homenajeados, como hacen la mayoría de las bandas tributo. Y encima, con las excelentes voces invitadas, fue un espectáculo para no dejar pasar.

Agradecimientos muchos para Evelyn Flores y Difusión Parlante por compartir con nosotros este excelente trabajo fotográfico que reproducimos a continuación: