Por Mariano Aratta // @gutenseth

Fotos: Popi Garrido // www.fb.com/popigarridofotografia

¡Qué bueno que no todos los dinosaurios se extinguieron! Y más si son dinosaurios que la rockean como Heavysaurios, que siempre tienen algo nuevo para dar.

Como ya es clásico de las vacaciones de invierno, los pequeños metaleros y sus papis tuvieron la primera función, el sábado pasado en Teatro Vorterix -repetirán el próximo fin de semana-. Y qué podemos decir que no hayamos dicho antes… la magia se hizo presente en todo su esplendor, en una sala colmada, con chicos haciendo headbanging y cuernitos. Desde temprano la gente se acercó en familia y ya en la puerta el espectáculo había comenzado: el «villano» de turno -un señor con un acento entre ruso y francés que cranea planes malévolos para eliminar a los saurios rockeros- estaba dialogando con niños y adultos, Shinobi News incluido, acerca de sus nuevos artilugios tramposos para hacer desaparecer a sus enemigos. Pero este señor no contaba con que Mr. Heavysaurio, Milli Pilli, Riffi Raffi, Komppi Momppi y Muffi Puffi tienen muchísimas armas para enfrentarlo: simpatía, un toque de ingenuidad, carisma y muchísimo rock.

Cuando dieron las 15 puntuales y el telón no se había abierto, los niños empezaron a pedir por sus héroes metaleros que se estaban haciendo rogar misteriosamente. Pero cuando salieron a escena el Vorterix estalló en un grito desde el «vip saurio», al cual lamentablemente no pudimos acceder porque excedíamos la altura correspondiente. No obstante, estuvimos lo suficientemente cerca como para ver el virtuosismo de estos músicos, que más allá de desplegar las alas de la fantasía para chicos, no dejan de ser una banda de primerísimo nivel profesional que no tiene nada que envidiarle a sus camaradas «para adultos». Los hits se fueron sucediendo: Mi Cumpleaños, Perdida en el Bosque -cantada por la tecladista Milli Pilli, con su «maquillaje de 65 millones de años»- y La Goma de Mascar de Sofi, en la cual Mr. H. les enseñó a los más pequeños a hacer un super mosh con un cocodrilo inflable. Delirio total de los menores y sonrisas emocionadas de los padres… promediando el show, la banda invitó a Javier «Knario» Compiano, cantante de Plan 4, quien saludó a los chicos poniendo «voz de monstruo» y cantó a dúo con Mr. H.

Así se fue desenvolviendo la tarde con un nuevo show de los Heavysaurios, que incluyó muchas novedades y diferencias con respecto a años anteriores, la inclusión de un intermedio con un DJ remixando temas -el «Hea VJ«- y el inoxidable clásico Quiero Leche, karaoke incluido para que nadie se quede sin cantar. Es sorprendente como la propuesta atrapa a todo tipo de público, desde señores metaleros entrados en barba y con tatuajes hasta chicos muy chiquitos a los hombros de sus padres. Sin dudas, esta banda no debe ser tomada a la ligera, al igual que ellos hacen con su público, con el cual mantienen una relación indiscutiblemente rockera, como si de adultos pogueros se tratase, sin pantominas ni posturas demagogas. Eso es metal en estado puro. Queremos Heavysaurios por muchos años más y, por lo pronto, los tendremos la semana que viene de nuevo en Teatro Vorterix. No dejen de chequear nuestra agenda en este link.

A continuación, les dejamos el álbum de fotos del show, trabajo de Popi Garrido exclusivo para Shinobi News.